Por pura amabilidad, Doris Langley Moore
marzo 29, 2022Aunque no soy muy aficionada al arte, esta novela llamó mi atención, tal vez porque está ambientada en un pequeño pueblo inglés e intuí que iba a disfrutar mucho, sobre todo con la ambientación. No me equivoqué, me ha gustado mucho. Hoy os hablo de Por pura amabilidad de Doris Langley Moore.
Ficha técnicaTítulo: Por pura amabilidad
Autor: Doris Langley Moore Traductor: Miguel Ros González Editorial: Alba Editorial Número de páginas: 416 ISBN: 9788490658208 PVP: 22 euros |
Sinopsis
En esta original mezcla -de sabor genuinamente británico- de comedia de costumbres y novela de detectives, un médico circunspecto recibe en pago a sus servicios a una anciana empobrecida unos baúles con "recuerdos de familia". Entre las reliquias hay un viejo vestido de novia, unos cuantos libros antiguos, un montón de trastos inútiles y dieciséis cuadros en pésimo estado. Sin embargo, la señora Du Plessis, la jefa de una de las hijas del doctor en la biblioteca municipal, aficionada al arte, intuye que estos cuadros bien podrían haber formado parte de la colección de Lorenzo de Medici: alguno podría ser un Botticelli, otro un Leonardo. La aventurada hipótesis es desmentida por sir Harry Maximer, el mayor experto en maestros antiguos de Inglaterra, que declara que son todo copias sin valor. Pero la bibliotecaria y el director de un museo provincial sospechan que sir Harry miente y está urdiendo una astuta estafa. De ahí arranca una serie de accidentadas investigaciones, carreras contrarreloj, amores espontáneos y seducciones interesadas.
Fuente: Alba Editorial
Impresiones
La historia comienza en el pueblo de Charlton Wells donde residen el doctor Sandlilands junto a sus hijos y también la señora Hovenden, viuda venida a menos, que conviene con el doctor pagarle sus servicios con unos baúles que contienen recuerdos de familia. Entre muchas otras cosas aparecen dieciséis cuadros en muy mal estado que llaman la atención del doctor y sus hijas. Una de ellas trabaja en la biblioteca municipal y le pide opinión a la señora Du Plessis, su jefa, a quien le entusiasma el arte y, después de estudiar los cuadros, concluye que podrían pertenecer a la familia Medici. Deciden entonces consultar a uno de los mayores expertos en arte del momento, sir Harry Maximer, quien les dice que son copias que no tienen ningún valor. Este dictamen no convence para nada a la bibliotecaria y tampoco al director del museo provincial al que esta también ha pedido opinión y no dudan en hacer todo lo que se encuentre en su mano para descubrir quién tiene razón sobre la autenticidad o no de los cuadros.
Nada más comenzar la lectura de esta novela de XX capítulos nos damos cuenta de que nos hemos transportado a un pequeño pueblo inglés para disfrutar del relato que nos ofrece un narrador omnisciente con un estilo propio de la época y muy inglés, no sé de qué otra manera podría describir el estilo para que se entienda bien lo que quiero decir. El lenguaje utilizado es sencillo, adaptado a la sociedad y la época en la que transcurren los hechos que se irán desarrollando a un ritmo más o menos tranquilo que va en aumento conforme nuestros personajes van descubriendo ardides, engaños, amores... La ambientación está muy bien conseguida, como ya he dicho, es como sumergirse en el pequeño pueblo de Charlton Wells y asistir como espectadores de primera fila a los acontecimientos que se están desarrollando allí, aunque también viajaremos fugazmente a Londres.
Los personajes que van a llevar la voz cantante en esta novela son la señora Du Plessis, una mujer viajada y versada en arte que no se deja amilanar por las opiniones de Maximer por muy experto en la materia que este sea. Ella cree que tiene razón y piensa defender su postura hasta el final. En el otro lado tenemos a sir Harry Maximer, experto en arte y también en argucias y engaños; no es la primera vez que su nombre sale relacionado con tasaciones y negocios cuanto menos cuestionables a pesar del cuidado que suele llevar para esconder su participación en estos asuntos. Junto a ellos tenemos un gran elenco de secundarios como las hijas del doctor, el propio doctor, el fotógrafo y el director del museo que se encargarán de enriquecer y embarullar la trama de esta novela.
Por pura amabilidad bebe de la novela de costumbres así como también de las novelas detectivescas. He disfrutado mucho con su lectura ya que está narrada de forma muy amena y los personajes muchas veces han sido capaces de provocar una sonrisa en mis labios. Una trama llena de humor, engaños, amores sinceros y otros que no lo son tanto que nos hará pasar buenos ratos de lectura. La recomiendo sin ninguna duda a cualquier lector.