La deshonra de Sarah Ikker, Yasmina Khadra
febrero 28, 2020
Los autores africanos siempre han llamado mi atención y aunque no los leo tanto como quisiera, siempre que lo hago disfruto mucho con sus obras. La prosa tan afilada que suelen utilizar me gusta mucho así que no me pude resistir a esta novela negra. Hoy os hablo de La deshonra de Sarah Ikker de Yasmina Khadra.
Ficha técnica
Título: La deshonra de Sarah Ikker
Autor: Yasmina Khadra Traductor: Wenceslao-Carlos Lozano Editorial: Alianza Editorial Número de páginas: 243 ISBN: 9788491817994 PVP: 18,00 euros |
Sinopsis
El teniente Driss Ikker está en el mejor momento de su vida. Disfruta de un feliz matrimonio con Sarah, la hija de un alto cargo de la policía marroquí; vive de forma acomodada, y le han dado un destino sin complicaciones en Tánger. Todo se le va a venir abajo cuando un día regresa a su residencia y se encuentra a Sarah en la cama, desnuda y maniatada. Cuando intenta socorrerla, recibe un fuerte golpe. Al recuperarse sabrá que Sarah ha sido violada.
Su única obsesión será averiguar quién cometió tal crimen. Aunque se le intenta apartar del caso, llevará a cabo sus propias pesquisas sin imaginarse que el resultado de sus investigaciones puede llegar a ser peor que el daño sufrido.
Fuente: Alianza editorial
Impresiones
Driss Ikker es un joven teniente de policía destinado en Tánger que goza de una vida tranquila debido a la posición de su suegro en la administración de Marruecos. Una noche, al volver antes de tiempo de un viaje programado a última hora, encuentra a su joven esposa maniatada en la cama; cuando se acerca a ella, alguien lo ataca y lo deja inconsciente. Será cuando despierte cuando se dará cuenta de lo que ocurrió esa noche: Sarah ha sido violada. Este hecho hará que su vida cambie radicalmente y todos sus esfuerzos se centren en encontrar al culpable.
Ikker es hijo de una familia humilde pero no se resignó a la vida que le tocaba vivir por lo que decidió estudiar Derecho; una vez licenciado, le fue difícil encontrar trabajo y decidió hacer las pruebas para ser policía; no era un alumno excesivamente brillante pero logró entrar en la escuela y un día en una fiesta conoció a Sarah, la hija del director Chorafa. Debido a su relación con la hija del director subió peldaños en el escalafón rápidamente y se granjeó con ello la enemistad de sus compañeros. Cuando Sarah es violada a Driss le apartan de la investigación por motivos obvios y este emprenderá una investigación por su cuenta a la vez que un viaje hasta los rincones más oscuros y profundos de la mente humana y nosotros lo acompañaremos.
A lo largo de los 24 capítulos que componen esta novela seguiremos los pasos que va dando el teniente Ikker en su investigación de la mano de un narrador omnisciente. El lenguaje utilizado para relatarnos los hechos es un lenguaje seco, mordaz y certero, totalmente exento de afectación y es una de las cosas que más me ha gustado y que, en mi opinión, comparten muchos autores africanos. No hacen alarde de grandes descripciones ni de artificios para narrar los hechos sino que lo hacen de forma austera, dejando todo el protagonismo a la historia y los personajes que la habitan.
La denuncia social está presente a lo largo de toda la narración y toma distintas formas: desde el nepotismo que reviste el ascenso en la escala policial de Ikker y las consecuencias que esto tendrá en sus relaciones con sus compañeros hasta la corrupción que habita en la sociedad marroquí que se hace patente en muchos momentos de la lectura. Las relaciones entre las distintas clases sociales que conforman la sociedad también tendrán su lugar en esta novela y conoceremos la forma de vida de las mujeres de las clases más favorecidas por medio de Sarah Ikker, la otra gran protagonista de esta novela; una vida de compras, reuniones y fiestas en casa de personas importantes y de éxito.
El personaje de Driss Ikker es un personaje duro; un hombre salido de la nada alzado a lo más alto de la sociedad gracias a un buen matrimonio pero que tendrá que pagar por ello. Aislado por sus compañeros, señalado como el "enchufado", apartado del caso más importante para él de su carrera, tendrá que enfrentarse a muchas piedras en su camino hacia la verdad. Un personaje al que conoceremos caído para, poco a poco, verlo levantarse y esforzarse por superar todos los obstáculos y descubrir la verdad. No es un hombre al que le vayamos a coger cariño, no es un personaje con el que sea fácil empatizar pero a medida que pasemos las páginas iremos entendiéndole un poco mejor y comprendiendo muchos de sus actos. A Sarah, su esposa, la conoceremos recluida en casa de sus padres después de la traumática experiencia que ha pasado; cuando vuelve a casa con su marido, intenta por todos los medios que todo vuelva a la normalidad pero no consigue que su esposo colabore, parece que el agraviado sea él en lugar de ella. Cansada de intentarlo, decide seguir con su vida, aceptar invitaciones a cócteles y fiestas hasta que Driss vuelva a ser el de antes.
La deshonra de Sarah Ikker es una buena novela negra. Una novela que retrata a la sociedad marroquí denunciando aspectos de esta como el nepotismo, la diferencia de clases y la corrupción. Una historia dura y unos personajes fuertes, una prosa desafectada y certera y un final sorprendente en el que queda patente la justicia poética han hecho que disfrute mucho de esta lectura. Una novela que no dudo en recomendar si gustáis de la novela negra y los autores africanos, la disfrutaréis seguro.
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Imagen tomada de Google |