Como os decía más arriba, no tenía intención de leer este libro; hace unos años, una amiga me dejó la trilogía, leí los tres libros y me parecieron repetitivos, tal vez por leerlos seguidos, no sé pero el caso es que no me gustaron tanto como para seguir leyendo a la autora. Fue por eso que no leí el libro con el que ganó el premio Planeta y tampoco tenía pensado leer este pero llegó a casa y decidí animarme. 

La historia se sitúa años antes de que ocurrieran los crímenes de los que es objeto la trilogía, cuando Amaia Salazar viaja a Estados Unidos para participar en un curso impartido por el FBI. Tienen que trabajar con un caso que lleva de cabeza a los federales: un asesino en serie siembra el terror matando familias enteras cuando se desata algún desastre natural y utilizando una puesta en escena bastante particular. Amaia se ganará un puesto al lado de Dupree, que está al mando del equipo que ha de resolver el caso, gracias a sus agudas reflexiones sobre los datos que les aportan. Este equipo viajará a Nueva Orleans a esperar al Katrina y también al asesino con la esperanza de atraparlo después de dos décadas de infructuosa búsqueda.

Esta será la trama principal de esta novela pero no la única ya que la autora entrelaza con ella distintas historias; una de estas tendrá que ver con el pasado de Dupree, el enigmático personaje que conocíamos por teléfono en la trilogía y a quien ahora vamos a conocer en persona; otra nos llevará de vuelta a Elizondo, a la infancia de Amaia, a sus problemas familiares y el incondicional amor de su tía Engrasi y por último, conoceremos a Nana, la tía de Dupree, que será la que nos muestre el impacto del huracán en la ciudad de Nueva Orleans. En mi opinión, esta última y la parte que vuelve al ya conocido pasado de Amaia son totalmente prescindibles en la novela y no han hecho más que entorpecerme la lectura hasta el punto de llegar a sacarme de ella en muchas ocasiones. En cambio las dos historias restantes me han gustado mucho aunque hubiera preferido que me las contaran en dos libros distintos ya que su alternancia en la novela no ha dejado que me meta de lleno en ninguna, cuando parecía que iba a encontrar algo de tensión me cambiaba al otro hilo y me desconectaba por completo. Aún así, la historia de Dupree me ha dejado expectante y con ganas de saber más, si la autora se animara a escribir sobre él, estoy segura de que leería esa novela.

El personaje principal, Amaia Salazar, no me ha sorprendido ni gustado más de lo que lo hizo en los libros anteriores, es decir, no me ha gustado nada; no me la he creído. Es cierto que hay personas que superan a la media en inteligencia y poderes deductivos pero lo de esta chica ya es exagerar y, además de ello, la autora no deja de hacerlo notar cada vez que tiene ocasión que es muy a menudo. Me ha cansado aunque es cierto que al final, no sé cómo, conseguí obviar estos pensamientos y decidí ignorar cada alabanza que se le dedicaba. 

Por el contrario, Aloisius Dupree me ha gustado mucho, tanto que me he quedado con ganas de conocerle mejor, de saber más de su infancia y de su vida en general y de verdad creo que sería un gran protagonista para una novela. También tiene una inteligencia y unas dotes deductivas fuera de lo normal pero no se hacen notar tanto como las de Amaia. 

El resto de integrantes del equipo me han parecido personajes muy interesantes pero poco desarrollados, solo en la medida en que se relacionaban con el caso y también me hubiera gustado saber algo más de alguno de ellos.

La ambientación me ha parecido fabulosa; gracias a ella, he conseguido imaginarme cada uno de los escenarios en los que transcurría la historia: las casas anegadas y sepultadas por el agua, los pantanos, el centro donde tuvo que refugiarse la población y los oscuros bosques de Elizondo por no hablar de los escenarios de los crímenes que hacían que se me pusieran los pelos de punta. Pero ha habido momentos en que las descripciones me han parecido demasiado extensas con lo que mi ritmo lector se resintió; hay veces que menos es más y no es lo que ha ocurrido en esta novela. 

Un narrador omnisciente será el que nos conduzca por todas estas historias y lo hará con un lenguaje sobrio, con abundantes diálogos pero también con muchas partes de narración que será en las que la autora nos muestre los escenarios o nos muestre cómo piensa un asesino en serie; el ritmo es pausado, incluso en los momentos álgidos de la narración, restando algo de tensión a la misma.

La cara norte del corazón es una novela que recomiendo a aquellos que disfrutaron con la trilogía del Baztán  y también a aquellos que quieran estrenarse con la autora. Una novela que está bien escrita y con unas historias interesantes aunque demasiadas en el mismo libro. En mi caso, y aunque al principio disfruté de la historia y prometía bastante, no la he llegado a disfrutar tanto como pensaba; sinceramente creo que las dos tramas principales hubieran quedado mejor en dos libros distintos pero ¡qué sabré yo!. Lo que sí tengo claro es que si hubiera un libro con Dupree como protagonista, sería la primera en leerlo.

¿Os imagináis vivir completamente aislados en una llanura dentro de la corteza de un árbol gigantesco? Pues en esta situación conocemos a la protagonista de esta novela. Vive totalmente aislada y sola, refugiada en el vientre de un baobab desde el que irá repasando lo que ha sido su vida hasta llegar a ese momento.
Ella (no sabremos su nombre) ha tenido muchos dueños ya que ha sido esclava toda su vida y, debido a ello, la acompañan vivencias y recuerdos muy duros y, a pesar de esto, se siente afortunada por muchos momentos que ha podido vivir. Fue la favorita de uno de sus amos, al que quiso de verdad y la muerte del cual la dejó huérfana y más sola aún si cabe. También conoció el amor y siguiendo al hombre al que amaba se embarcó en la aventura que acabó con sus huesos dentro del tronco del baobab.
Fue madre de sus hijos y de los hijos de otras hasta que les eran arrebatados para ser vendidos en el mercado de esclavos; unos hijos a los que apenas conoció y a los que está segura que no reconocería si los viera después de tanto tiempo. También fue la mujer callada que acompañaba a sus amos en los banquetes, la que distendía los momentos tensos con sus conversaciones, la que cuidaba de ellos en la enfermedad y también la que los acompañaba en la alcoba al caer la noche. Ella fue muchas cosas pero no fue hasta que recaló en la llanura en la que habita el baobab cuando se sintió libre de verdad, dueña de su cuerpo y de su mente, dueña de su vida y libre para hacer de esta lo que deseara.

Esta es una novela corta, poco más de 100 páginas la componen, en la que no encontraremos diálogos ni tampoco capítulos sino una narración prácticamente ininterrumpida en la que su actual vida se irá intercalando con los recuerdos de su vida pasada para que el lector entienda las decisiones que ha tomado y las acciones que va a llevar a cabo. Será su voz la que nos relatará su historia haciendo uso para ello de un lenguaje cuidado, culto, con numerosas metáforas, frases muy elaboradas y un ritmo pausado; todo ello recuerda la faceta de poeta de la autora y también hace muy lenta y, en algunas ocasiones, enrevesada su lectura. Por otro lado, la ambientación es muy buena, la autora es capaz de trasladarnos con sus letras a todos los escenarios que vamos recorriendo durante la narración.

La expedición al baobab me ha resultado una lectura algo pesada aun siendo de poca extensión. Muchas de las vivencias que relata la autora me han resultado muy interesantes y la ambientación es maravillosa aunque en la narración me ha faltado pasión, me ha parecido algo fría. No me atrevo a recomendarla a todo el mundo porque no es una novela para todo tipo de lectores aunque si os gusta la prosa que roza lo poético, estoy segura de que disfrutaréis de ella.

Imagen tomada de Google

Fuente: Planeta

Ari Thór Arason es un joven policía al que le ofrecen su primer destino en Siglufjördur, un pequeño pueblo aislado cerca del Círculo Polar Ártico, cuya única vía de acceso es un estrecho y antiguo túnel. Sin pensarlo dos veces, decide aceptar esta oportunidad aunque eso suponga dejar su recién iniciada vida en común con Kristín en Reikiavik. Cuando llega al pueblo el comisario de la policía Tómas le da la bienvenida con la frase: "aquí nunca pasa nada". Ari Thór piensa que va a ser un destino aburrido pero pronto se encuentran con la extraña muerte de un escritor hallado en el teatro en el descanso de los ensayos de la obra que están preparando en el pueblo. Tómas, fiel a su lema "aquí nunca pasa nada" rehúsa avisar a la policía científica de la capital y quiere cerrar rápidamente el caso como una muerte accidental. A los pocos días el cuerpo de una mujer es encontrado inconsciente y rodeado de sangre en el jardín de su propia casa. ¿Están los dos sucesos relacionados? ¿Se decidirá el comisario Tómas a investigar en profundidad estos sucesos? ¿Es cierto que en Siglufjördur nunca pasa nada?

Ari Thór, nuestro joven e inexperto protagonista, tendrá que hacerse valer en un pueblo en el que es conocido como el Reverendo, debido a su incursión en el mundo de la Teología, un pueblo donde la vida fluye a su propio ritmo, un ritmo lento, un lugar donde todos se conocen, donde todos lo saben todo de todos y las puertas no se cierran con llave; en definitiva, un lugar donde nunca pasa nada...

La novela consta de 46 capítulos acompañados de un prólogo y un epílogo y abarca un espacio temporal de un año, desde la primavera de 2008 hasta la del 2009. Un narrador omnisciente será quien nos relate esta historia entre cuyos capítulos encontramos algunos escritos en letra cursiva y que son los únicos que no van fechados; estos nos llevan a un momento y lugar en el tiempo distintos de la trama principal y nos mantienen en vilo durante gran parte de la narración. El lenguaje utilizado es sencillo y cuidado; encontraremos muchos diálogos que contribuirán a mantener el ritmo de la novela que no será trepidante ya que la vida en Siglufjördur tampoco lo es pero que nos mantendrá pegados a la novela. En cuanto a la ambientación, el autor nos envuelve en una bruma gris, en un paisaje blanco, nevado pero no tendremos la sensación de estar en un lugar apacible sino en uno en el que hay muchos secretos escondidos que luchan por salir a la luz. También experimentaremos junto a Ari Thór la sensación claustrofóbica de no tener vías de escape en los momentos en los que las tormentas de nieve azotan la zona, en esos momentos es imposible abandonar el pueblo.

Esta novela se asemeja mucho a las de crímenes de habitación cerrada aunque en nuestro caso la zona a cubrir es algo más grande que una habitación; aun así, me los ha recordado mucho porque nadie ha podido abandonar el pueblo y alguien tiene que saber algo, no hay más testigos ni sospechosos que los habitantes del pueblo y será Ari Thór quien tenga que investigar, hablar con los residentes, atar cabos para llegar a saber qué ha ocurrido en realidad.

Algo que me ha gustado especialmente de la novela es que las historias que hay detrás de los personajes nos serán contadas desde su propia perspectiva, conoceremos su pasado y sus circunstancias presentes y con ello tendremos ventaja frente a nuestro investigador que desconocerá estos hechos. Gracias a esto podremos hacer nuestras apuestas, intentar descartar coartadas, buscar el fallo en las suposiciones pero ni así llegaremos a descubrir gran cosa hasta que se nos desvela en la novela. Me ha gustado mucho la forma de llevar esta historia, haciendo protagonistas a cada uno de los personajes y con un método de investigación rudimentario en el que todo se basará en las entrevistas, deducciones y suposiciones.

La sombra del miedo me ha gustado mucho, cada vez que me ponía con ella me era difícil parar de leer. Es una novela con una historia escondida que nos sorprenderá, una ambientación asfixiante y unos personajes a los que parecerá que conocemos de toda la vida. Un pequeño pueblo aislado, un paisaje nevado, unos vecinos entrañables...un lugar con muchas cosas que esconder y misterios por descubrir. Esta es la primera de cinco novelas con cuya lectura seguiré porque he disfrutado mucho de esta y os la recomiendo sin ninguna duda.

Antes de pasar a comentaros mis impresiones me gustaría hacer una puntualización sobre esta novela: es absolutamente imprescindible haber leído las anteriores para poder entender la historia y disfrutar por completo de ella. Intentaré no hacer ningún spoiler de las anteriores pero sé que va a resultar harto difícil ya que están muy conectadas.

La acción se sitúa un año y medio después de los terribles sucesos que vivimos en El Ángel. Colomba se ha retirado al pequeño pueblo en el que pasó momentos de su infancia, desconectada del mundo, dejando pasar los días preguntándose dónde estará Dante y, lo que es más importante, si seguirá todavía con vida. Después de unos días en los que la nieve ha azotado la zona, Colomba decide salir de la casa a por leña y encuentra en su cobertizo a un joven aterido de frío y con las ropas llenas de sangre aunque la expolicía se da cuenta desde el primer momento de que la sangre no es suya. El joven está desorientado y no es capaz de comunicarse debido, además, al trastorno que padece, el autismo. Sabiendo que se arrepentirá enseguida de lo que se dispone a hacer, decide llevar al chico a la comisaría más cercana aunque no llegará a su destino: por el camino encuentra un control de carretera, se ha cometido un horrendo crimen: dos personas han sido halladas muertas con signos de extrema violencia en una casa cercana. Colomba no tardará en descubrir que se trata de los padres de Tommy, el joven autista que la acompaña en su coche. Colomba se encuentra en medio de una investigación policial abierta de la que inconscientemente no quiere apartarse ya que en el poco tiempo que ha tratado a Tommy se ha dado cuenta de que su comportamiento lleva la marca del Padre.

En otra línea argumental encontramos unos capítulos en cursiva que son los que se ocupan de contarnos qué le está ocurriendo a Dante en su cautiverio; sí, nosotros sabremos cosas que la pobre Colomba desconoce. Dante es un desecho humano pero tiene prácticamente intacta su arma más valiosa: su mente, ¿será suficiente para vencer a su captor? ¿será Colomba capaz de descubrir dónde se encuentra y liberarlo?

La novela se estructura en cuatro partes tituladas compuestas por capítulos numerados que a su vez se dividen en subcapítulos; todas estas partes están introducidas por unas páginas en cursiva tituladas Antes donde volvemos a momentos pasados de la historia. Culmina esta novela con un epílogo con el que se cierra esta trilogía protagonizada por Colomba Caselli y Dante Torre. 

Un narrador omnisciente será el encargado de relatarnos esta historia utilizando para ello un lenguaje sencillo y fluido tanto en las partes dialogadas como en las narradas; el autor no abunda en descripciones superfluas pero sí se detiene en aquellas que son importantes para la trama o para generar en nosotros los sentimientos que él busca, estas descripciones son detalladas y, en algunos momentos, minuciosas. El ritmo que acompaña a esta novela va en aumento según avanzamos en la historia cuando esta lo requiere ya que se precipitan los acontecimientos; por su parte, la tensión y el suspense están presentes desde la primera página.

La historia en sí, de la que no voy a contar nada más (sé que no he contado apenas nada pero prefiero quedarme corta a pasarme), lleva la marca de la casa, Dazieri sabe cómo construir una trama enrevesada, con muchas aristas y rincones para desconcertar al lector, conduciéndolo poco a poco hacia sus tan característicos, sorprendentes y magníficos golpes finales. Esta novela no va a ser menos y también nos quedaremos con la boca abierta hacia el final de la misma aunque, echando la vista atrás, no supera a su predecesora, El Ángel, novela que me ha parecido la mejor de esta magnífica trilogía. 

Los personajes principales son de sobra conocidos para los que seguimos esta serie y siguen mostrándose tan sui géneris como siempre aunque por momentos en esta novela veremos que son humanos, que tienen debilidades y pasan por momentos de apuro aunque también veremos cómo son capaces de remontar el vuelo y salir adelante. Colomba y Dante, Dante y Colomba, son unos personajes que me han encantado y de los que me va a costar despedirme. El resto de personajes también están bien perfilados y caracterizados cada uno en el papel que tiene que jugar en la historia; el "malo" cuyo nombre me guardo para mí me ha parecido un golpe de efecto total en la novela. 

El Rey es el broche perfecto para una trilogía que me ha encantado; sin ser, en mi opinión, la mejor novela de las tres recoge el testigo de las anteriores y deja cerrada una historia apasionante, llena de intriga y de golpes de efecto que hará las delicias de los amantes del género. A Colomba y Dante o los amas o los odias y yo los amo y me despido de ellos con mucho pesar. Os recomiendo esta trilogía sin ninguna duda, tendrá siempre un lugar de honor en mi biblioteca.

Fuente: megustaleer

La finca Las Urracas se dice que está maldita; las mujeres de la familia Veltrán-Belasco también cargan con dicho sambenito, su pecado: habitar dicha mansión y haber nacido con el pelo rojo. La finca está rodeada de viñedos que desde hace años no dan fruto y la familia se ve obligada a subsistir como puede.

Gloria, la mayor de las hermanas, deja pasar los días a la sombra de su hermano mellizo Rafael, bajo el yugo de su tía Ángela y algo distanciada de sus hermanas pequeñas Teresa y Verónica. Pero de un día para otro todo cambia y su vida se vuelve del revés: tiene que ser la cabeza de familia e intentar luchar por su vida, su familia y sus tierras. Junto a sus hermanas luchará por salvar sus tierras, investigará para probar todos los tratamientos posibles para que la tierra sea fértil y proporcione los frutos necesarios para que su negocio prospere y puedan gozar de una vida mejor; una vida en la que ellas serán las dueñas de su destino aunque saben que, para lograrlo, necesitarán mucha fuerza y unión entre ellas porque tendrán que enfrentarse a casi todo un pueblo anclado en unas tradiciones, creencias y costumbres en las que la mujer es una mera ama de casa al servicio de su marido y no acepta que sea Gloria la que dirija la finca de Las Urracas.

La voz narrativa queda a cargo de la propia Gloria que será quien nos desgrane su historia, una historia que empieza poco después de la muerte de su madre dejando a sus hijas solas en un mundo de hombres; una historia con muchos secretos, misterios y hechos extraños . Gracias a la narración en primera persona seremos capaces de ahondar en los sentimientos y pensamientos de la protagonista, veremos el paisaje con sus propios ojos y disfrutaremos de él gracias a las magníficas descripciones que nos regala la autora; en muchos momentos me he sentido en medio de los viñedos de la finca, recorriendo el camino que la separa de San Dionisio o sentada en la cocina esperando el primer café de la mañana. Y todo ello utilizando un lenguaje sencillo con el que la autora te atrapa desde las primeras páginas y te mete de lleno en esta magnífica historia.

Son varios los temas que vamos a encontrar en esta novela pero yo destacaría el retrato que hace la autora de la sociedad de finales del siglo XIX: una sociedad en la que, como comentaba antes, el hombre está al frente de todo y la mujer no puede más que obedecer y quedarse en casa. En esta novela veremos cómo el aire fresco llegado de Francia junto con la necesidad de tener una vida impulsan a Gloria a actuar en contra de todas las tradiciones enraizadas en la sociedad. El mundo del vino desde el cultivo de la uva hasta su recolección y tratado aparece también muy bien reflejado en esta historia; no es un tema que me atraiga especialmente pero he de reconocer que he aprendido cosas curiosas e interesantes leyendo esta novela.

En cuanto a los personajes, Gloria destaca por encima de todos, es la auténtica protagonista de una historia en la que todo gira, todo depende de ella: es una joven a la que la vida le ha dado muchos reveses. Tanto ella como sus hermanas han crecido viendo cómo son rechazadas, apartadas e incluso odiadas por sus vecinos ya que creen que están endemoniadas por el hecho de ser pelirrojas, ¡qué ignorancia ¿verdad?! Pese a todo, Gloria se ve obligada a madurar de golpe para poder ocuparse de sus hermanas y su hacienda y se nos muestra entonces como una mujer fuerte, decidida, inteligente y  muy valiente, capaz de todo por salvaguardar lo que quiere. Me ha gustado muchísimo esta mujer, como también lo han hecho sus hermanas: Teresa es la "cerebrito" de la casa, una joven con un secreto que marcará su vida pero que también luchará por sus creencias y modo de vida y Verónica, la pequeña, es una niña especial en todos los sentidos, un espíritu bueno y libre que nos dará más de una sorpresa.

El resto de personajes secundarios también están caracterizados en la medida justa dependiendo de su aporte a la historia; he odiado a unos y me he enamorado de otros pero ninguno me ha dejado indiferente.

Las hijas de la tierra es un novelón con todas las letras y en mayúsculas. Una historia apasionante en la que encontraremos muchas tramas que se entrelazan con la principal para conformar un todo que nos atrapará de principio a fin; unos personajes divinos con unas personalidades muy bien definidas y una prosa la de Alaitz digna de elogio; cuenta vidas duras, llenas de dolor pero lo hace con tal delicadeza y mimo que es siempre un placer leerla. 

Santi, conductor de tren, conduce su máquina por la línea de Urdaibai un viernes de octubre cuando ve algo a lo lejos que no le parece normal: una mujer se encuentra en el centro de las vías atada a una silla y sin posibilidad de huida, es Natalia Etxano, la periodista más conocida y polémica de Gernika. Santi intenta sin éxito detener la locomotora pero nada puede impedir que la arrolle, no tiene espacio para la frenada. Este suceso conmociona a la población, más si cabe cuando se descubre que ha sido emitido en directo en Facebook. Un tulipán rojo aparece pegado a las manos de la finada, flor esta que no es propia de la época del año en la que nos encontramos. ¿Qué mente enferma es capaz de idear, ejecutar y retransmitir tan horrendo crimen? ¿De dónde sale la flor, único elemento hermoso en la triste estampa que se nos muestra?

El departamento de policía de Gernika se ve incapaz de resolver el crimen sin ayuda así que desde las más altas instancias se decide formar una unidad especializada, la Unidad Especial de Homicidios de Impacto, en la que colaborarán agentes de varias comisarías para esclarecer crímenes múltiples o de mucha repercusión mediática. La ertzaina Ane Cestero estará a cargo de este grupo de cinco personas formado, además de ella, por Aitor Goenaga, su compañero, Txema Martínez, Julia Lizardi y Silvia, la psicóloga, estos tres últimos de la comisaría de Gernika. Este heterogéneo equipo será el que nos acompañará a lo largo de esta historia llena de misterios y giros inesperados.

La novela se estructura en 79 capítulos numerados y fechados en los que se van intercalando otros sin numerar que nos retrotraen al pasado siendo el más lejano 1985 a partir del cual nos iremos acercando al tiempo presente. Los capítulos que corresponden a 2018, la trama del presente, están narrados por un narrador omnisciente mientras que en los que nos llevan de vuelta al pasado encontramos la voz de un misterioso narrador protagonista del que desconocemos su nombre. Tanto unos como otros son de corta extensión y utilizan un lenguaje sencillo, muchos diálogos y un ritmo ágil que va creciendo en intensidad según vamos avanzando en la trama de esta novela.
La ambientación es muy buena, tanto que el autor consigue que podamos imaginar como si la estuviéramos viendo la estampa de esa tierra del Norte de España donde transcurren los hechos: nos meceremos con Julia en el Cantábrico a la luz de la luna, tomaremos cañas con Ane en el Itsaspe e incluso seremos testigos de una gran tormenta en alta mar; también recorreremos las calles de Gernika buscando al asesino y todo ello como si nos encontráramos allí gracias a la forma tan visual que tiene Ibon de describir sus escenarios.

Los personajes me han gustado mucho todos, el "malo" incluido. Todos ellos están bien definidos como también lo están las relaciones que había entre ellos y también las nuevas que nacen a raíz de trabajar juntos en este caso. En esta novela la voz cantante la llevan las mujeres, serán Ane y Julia las que dirigirán los pasos de sus compañeros hacia la resolución de un caso difícil e intrincado en el que nada es lo que parece; las dos tienen un carácter fuerte, acostumbrado a lidiar con momentos duros en lo personal y en lo profesional y este caso las hará fortalecerse todavía más aun cuando en algún momento parezcan desfallecer. Aitor y Txema son resolutivos y eficaces y ponen el contrapunto a los métodos a veces poco ortodoxos de sus compañeras. El antagonista tampoco les va a la zaga; aunque no sabremos quién es hasta casi el mismo momento en el que lo descubren nuestros protagonistas, sí iremos intuyendo su personalidad por los actos que lleva a cabo: es una persona metódica, que nunca deja nada al azar y centrada en su macabra tarea; alguien obstinado que no parará hasta que consiga acabar lo que empezó.

La danza de los tulipanes es un magnífico thriller con momentos que nos dejarán con la boca abierta y, cuando apenas la hemos cerrado, volveremos a quedarnos boquiabiertos de nuevo. Una historia con muchas aristas, muchos giros totalmente inesperados que provoca que el lector haga cábalas sin parar; yo las hice y no me sirvieron de nada. Unos personajes con una gran personalidad ponen la guinda a este pastel. Una novela que ningún amante del género puede perderse.

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