Hace años gustaba de quedarme hasta la madrugada escuchando la radio y así es cómo conocí a Ayanta Barilli; su programa iba detrás del que yo solía escuchar y muchas veces me quedaba con ella un rato más porque me parecían interesantes las historias que en él se contaban. Cuando se anunció su nombre como finalista del premio Planeta enseguida me picó la curiosidad por su libro y ya cuando leí la sinopsis supe que lo leería seguro.

Un mar violeta oscuro comienza con un prólogo en el que será la propia autora la que nos lleve atrás en el tiempo al momento en el que murió Ángela, su abuela y lo que este hecho supuso para ella. Había pasado gran parte de su infancia con ella y fue un duro golpe su desaparición pero lo fue aun más el encontrar entre las cosas de la fallecida una novela que esta escribió, Sequenza familiari que despertó en Ayanta la necesidad de saber más sobre su familia. Desde ya os digo que el prólogo es absolutamente cautivador tanto que cuando lo leí pensé: si cumple lo que promete me encuentro ante un gran libro y así ha sido.

A este prólogo tan prometedor siguen tres partes que llevan los nombres de su bisabuela, su abuela y su madre, es decir, Elvira, Ángela y Caterina. La autora entrelaza la novela de Ángela, el diario de Caterina y algunas cartas suyas y de su madre cruzadas con su padre con sus propios recuerdos para reconstruir momentos importantes de la vida de estas tres mujeres y también de la suya propia.
Una de las cosas que más me han gustado de esta novela es la cohesión casi perfecta que logra la autora; en ocasiones introduce momentos de su vida, de su presente que no sabes muy bien por qué están ahí para luego retomarlos al hilo de algún otro acontecimiento del pasado que esté narrando. No hay fisuras en la narración sino que la historia parece que estuviera esperando ser contada a pesar de beber de varias fuentes para componerse.
Esta es una historia que rezuma sentimientos, el dolor, el odio, la desazón, la angustia y la ira pero también el amor pasean por sus páginas hasta traspasarlas y golpear directamente al lector justo en el centro del pecho. Una prosa muy cuidada, un gran dominio del lenguaje, una cadencia constante y una gran sensibilidad consiguen hacernos partícipes de los sentimientos que embargan a la autora mientras escribe; no se esconde, no intenta disculpar comportamientos sino que se enfrenta a ellos, tanto a los propios como a los de sus antepasadas demostrando una gran fuerza y valentía.

Como estáreis intuyendo ya muchos son los temas que se tratan en esta obra entre los que destaca el machismo imperante en la sociedad en la que Elvira, Ángela y Caterina vivieron y del que todavía no nos hemos librado. Estas mujeres pasaron su vida subyugadas por una sociedad para la que eran de segunda fila y  las denostaba si destacaban o tan solo lo intentaban. Las relaciones familiares son otro de los pilares que sustentan la novela. Una familia en la que las mentiras y las verdades se difuminan; una familia que ha de pasar pruebas muy duras que no hacen más que fortalecer el vínculo que existe entre sus miembros. Elvira inició la búsqueda de la libertad y la felicidad y sus descendientes siguieron desafiando al destino en su empeño por encontrarlas.

Elvira se casó joven y enamorada de Evaristo quien pronto se reveló como un hombre tiránico, egoísta y mujeriego que solo se preocupaba por sí mismo y que destrozó la vida de Elvira hasta llevarla a la locura.
Ángela tuvo una infancia muy difícil en la que se sentía ignorada, sola y desvalida lo que la hizo crecer muy rápido. Tampoco tuvo suerte en su matrimonio ya que su marido partió a la guerra dejándola sola con una niña pequeña y otra en su vientre. Mientras él se dedicaba a holgar con unas y otras, Ángela se las arreglaba como podía para cuidar de sus hijas, de su madre y de ella misma.
Caterina era una joven rebelde, diría que adelantada a su tiempo, cosa que no estaba bien vista en la sociedad en la que vivió. Se enamoró locamente de un hombre que la quiso con locura pero era una relación que ambos sabían que no podría llegar a más: pasaron unos años muy felices juntos, tuvieron una hija pero el destino los llevó por caminos separados. Conoció a otro hombre, rehizo su vida con él pero no supo o no quiso ver la maldad que este escondía en su interior.

Un mar violeta oscuro es una novela preciosa a la vez que dura con muchas sombras y pocas luces. Una narración en la que la vida de tres mujeres se mezcla con la de su descendiente para conseguir una historia cohesionada que, personalmente, me ha dejado algo tocada en algunos pasajes y que ha conseguido que tuviera los sentimientos a flor de piel durante toda la lectura. Me gustaría destacar la gran valentía de la autora al desnudarse ante el lector como lo ha hecho, dejando al descubierto momentos y detalles muy íntimos y espero sinceramente que haya conseguido el fin que se proponía al escribir esta historia. Una novela muy recomendable.

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