Peter Lindgre está visitando la tumba de su madre cuando recibe una llamada de Manfred Olsson, su compañero en la policía desde hace tiempo. Han encontrado en medio de un enorme charco de sangre el cadáver de una joven; su cabeza, separada del cuerpo, los mira de frente igual que si los estuviera esperando. Nadie sabe quién es la chica pero sí saben en casa de quién la han encontrado: la vivienda es propiedad de Jesper Orre, un importante hombre de negocios, odiado y amado a partes iguales.
Pocas son las pruebas con las que cuentan y muchos los interrogantes que tienen que contestar así que deciden llamar a Hanne Lagerlind, una especialista en perfiles criminales que ya colaboró con la policía diez años atrás.

Emma Bohman es una joven dependienta en una tienda de ropa; con una tía como única familia, vive con su gato en un pequeño apartamento. Su vida es el trabajo e intentar estudiar lo que no pudo cuando era adolescente pero un buen día Jesper entra en la tienda donde trabaja y todo cambia para ella. Comienzan a verse en secreto ya que al ser él una persona conocida no estaría bien visto que saliera con una trabajadora de una de sus tiendas. Todo parece ir como la seda hasta que él no se presenta a una cita y parece que se lo ha tragado la tierra.

Tres son las voces narrativas, todas ellas protagonistas, que nos contarán los hechos. En capítulos alternos que llevan por título el nombre de su narrador, Peter, Hanne y Emma irán mostrándonos poco a poco sus respectivas historias, siempre desde su propio punto de vista, con lo que nos dejan libertad para creerles del todo o no hacerlo. Peter y Hanne se centrarán en el presente, en la investigación del caso, aunque también irán repasando momentos de sus vidas que para ellos fueron importantes.  Por su parte Emma empezará su narración dos meses antes del momento presente para ir acercándose poco a poco a este; no solo nos contará su historia de amor con Jesper sino también recuerdos de su pasado que la marcaron, sobre todo de su infancia, y que la hacen ser la mujer que es hoy. En mi opinión esta voz es la que lleva el peso de la narración, la que más me ha interesado y desconcertado a la vez, un personaje muy, muy bueno y hasta aquí puedo leer.

La autora utiliza una prosa ligera, sencilla y clara en una narración con muchos diálogos que agilizan la lectura; el ritmo no es frenético, de esos que te dejan sin aliento, sino ligero, lo justo para que no puedas parar de leer pero al mismo tiempo vayas relacionando todas las aristas que hay en esta historia, que las hay y muchas. La ambientación está muy bien conseguida: el piso de Emma, la casa donde se halla el cadáver de la joven, los parques cubiertos de nieve...todo es fácil de imaginar ayudados por cómo lo cuenta la autora.

Antes de empezar a leer esta novela pensaba que iba a encontrarme con un thriller nórdico tipo El caso Hartung pero he de decir que son completamente distintos; en esta lectura priman los personajes sobre la investigación, unos personajes poliédricos que nos contarán lo que quieren que sepamos, no más, y que nos mantendrán en vilo ansiosos por descubrir más cosas sobre ellos. Peter, Hanne y Emma arrastran cargas del pasado que, en unos más que en otros, les lastran su presente y muy probablemente su futuro. Son personajes con los que es muy fácil empatizar, hacer tuyos sus desvelos y preocupaciones aunque también pueden ser desconcertantes en algunos momentos.
Peter y Hanne poco a poco irán acercándose a la verdad de este crimen mientras que Emma va acercando al lector al momento del mismo mientras le hace partícipe de su infancia y adolescencia.

La desconocida es un thriller psicológico desconcertante; una novela que me ha tenido con el corazón en un puño casi desde el principio, con unos personajes con tantas facetas que no sabía bien con cuál quedarme y que me han gustado mucho. Esta lectura me ha sorprendido gratamente, su estructura me ha parecido muy original y su contenido muy bueno, lástima que me tenga que contener para no desvelar datos de más. Una novela que os recomiendo sin dudarlo. 

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